Prepárate. Porque “La guerra no es santa” te va a hacer llorar. Tan sólo tendrás que ponerte en el lugar. Está escrito con la sinceridad de quien no da abasto. Farahd Bitani tiene tanto que contar que se le amontonan los contenidos. Se mezcla. Le duele hasta su vida. Es el relato tumultuoso de cómo se gesta y continúa un Estado fallido. Es el relato de vida de todas las personas que rodean o rodearon a Farhad Bitani.